En la sección de Protocolos Notariales
del Archivo Histórico Provincial de Soria, un buen número de cajas
corresponden a las notarías de San Pedro Manrique y su Tierra. Dan
comienzo los legajos a final del siglo XVI y terminan en el XIX, con
algunos saltos en las fechas que corresponden, casi con seguridad, a
volúmenes perdidos. En general los documentos están en buen estado,
salvo, en algunos casos, el comienzo y final de los volúmenes cosidos,
en los que se han cebado los roedores antes de su traslado al Archivo
Provincial.
Buscábamos en ellos documentación sobre
una antigua ermita, Santa María del Monte Seces, perteneciente a San
Pedro Manrique y desde hace más de cien años a Sarnago, por compra,
aunque siempre ha estado en el término de este pueblo, en la linde con
Fuentebella. Una ermita rica en tierras, gestionada desde la parroquia
de San Martín, de San Pedro, de la que en la actualidad no quedan más
que ruinas. Cerca de ella había una tejera donde acudían a trabajar
profesionales del Sur de Francia.
En vista de la abundante documentación,
no sólo de la ermita, si no de toda la Tierra de San Pedro, hemos
decidido abrir una nueva sección e ir dando a conocer algunos de estos
interesantes documentos. Algunos de ellos –obligaciones, cartas de
venta, poderes, curadurías- nos indican que en el siglo XVII y parte del
XVIII –lo hasta ahora expurgado- pueblos que han pasado a la historia de
la memoria colectiva y de los apenas quedan los cimientos de algunas
casas, estaban bien vivos, y entre ellos, los más habitados eran
Rabanera y el Molino de Vea, pero también Verdonces, La Losa, Horcajo y
Molino Romero Gil.
Dado el volumen de la documentación, nos
hemos centrado de momento en las obras más importantes que se hicieron
–como la del Hospital de Villa y Tierra que publicamos-, los contratos
con los tejeros, médicos y otras profesiones, los nombres de los
habitantes de los pueblos ya desaparecidos, y pleitos, como el del
Concejo de los pueblos de Palacio y la Ventosa, para que les pusieran
sacerdote y no tener que desplazarse a Rabanera, y otros temas que nos
han resultado de interés.
En cada actualización procuraremos dar a
conocer uno de ellos, teniendo en cuenta la dificultad y paciencia que
requiere la transcripción de documentos de esas fechas. De esta forma
trataremos de ampliar en lo posible la visión que tenemos en la
actualidad de una zona depauperada, pero que un día fue importante
gracias, sobre todo, a la Trashumancia y los oficios de ella derivados,
que se daban cita en la Villa de San Pedro Manrique.