 A Pie por Soria
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En Aldea de San Esteban, encontraremos restos de románico en su parroquial.
A Guijosa pertenecen las ruinas del Monasterio de Santa María de jerónimos, y entre éste y el pueblo se encuentra la ermita románica de Nuestra Señora de la Concepción. La nave es más ancha que alta, el ábside cuadrado y los aleros se apoyan sobre canecillos labrados sencillamente. La portada, de vueltas lisas, tiene un par de columnas con capiteles decorados con motivos de seres fantásticos, entre ellos un centauro con flecha (como los de Tiermes y Caracena). En Matanza de Soria, la iglesia de San Juan Bautista, conserva del románico un ábside de tambor. En su centro se abre un ventanal enmarcado por dos arquivoltas y apoyado en dos columnitas con capiteles, decorados con motivos vegetales y animales. Miño de San Esteban posee en su iglesia de San Martín, según Gaya Nuño, uno de los ejemplares más puros del románico de la Ribera del Duero. Aunque está muy reformada, esta iglesia de torre austera de tres cuerpos y nave única, tiene una portada (repintada) de seis arquivoltas abocinadas de medio punto, decoradas con entrelazos, ovas, dientes de sierra.... Dos columnas rematadas con sendos capiteles, perfectamente conservados y decorados con pareja de jinetes y dos grifos, rematan el conjunto. Una sencilla y bella portada nos encontramos en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Morcuera, decorada con puntas de estrellas en su portada de una archivolta.
En
la parroquial de
A 500 metros de la villa de Soto de San Esteban se encuentra la ermita de la Virgen de los Rubiales, de varios cuerpos con puerta de entrada en arco de medio punto y espadaña con tejadillo. En
el cementerio de
En Zayas de Báscones la iglesia de Santiago Apóstol nos muestra una portada románica de cuatro arquivoltas, guardapolvos con bolas y los capiteles están decorados con hojas y aves. La
iglesia de San Martín de Tours, en
© soria-goig.com
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El Románico
en
Tierras de San Esteban de Gormaz
Berzosa tiene, en la iglesia de San Martín, un
precioso monumento románico. Aunque reedificada en el siglo XVII, conserva del románico,
los muros laterales y una espléndida galería porticada. La portada, de cuatro
arquivoltas sencillas, pero primorosamente labradas, está rematada, superiormente, por
una cornisa sobre canecillos, cuyos motivos son cabezas humanas con gestos humorísticos;
sus capiteles se conservan en buen estado y bellamente decorados con motivos florales,
leones, una figura a caballo y personajes emparejados. Protegiendo esta bella portada se
abre la galería porticada de siete arcadas, apoyadas en columnas de cuádruple fuste. Los
capiteles, más sencillos que los de la portada, estan adornados con motivos florales,
leones y caballos.
Castillejo
de Robledo ostenta una bella iglesia románica restaurada recientemente, dedicada
a la Asunción de Nuestra Señora. Está ubicada en un paisaje propio de leyendas, al pie
de las ruinas de un viejo castillo de templarios. La tradición sitúa aquí la Afrenta de
Corpes, hecha a las hijas del Cid por sus maridos, los condes de Carrión. De una sola
nave con ábside de tambor, vamos a encontrarnos con un completo ejemplo de nuestro
románico. La espléndida portada meridional de arquivoltas apuntadas, conserva parte de
su policromía origina. El ábside presenta una bella estructura con tres ventanales, dos
columnas y en la cornisa una serie de canecillos de temática variada y original: rostros
humanos, cabezas de animales, hojas... y una pareja amorosamente unida. Nuestra visita al
interior de la iglesia con la nave de techumbre de madera, el prebisterio de bóveda
apuntada y el arco de triunfo de herradura (como el de San Juan de Duero), se verá
completada por unas pinturas románicas en el muro septentrional que Gaya Nuño relaciona
con la Cruzada contra Barbastro en 1061. En la ermita de los Santos Mártires, románica
también y de ábside cuadrado, se hallaron y fueron destruidas unas pinturas en 1933, que
a algunos hicieron pensar que podría hacer referencia a la Afrenta de Corpes.
En
Peñalba de San Esteban, la iglesia de Santa María La Mayor, de
cabecera gótica y galéria porticada, alberga restos románicos. 
En
Todo esto, propio del
románico ribereño, parece deberse a una profunda herencia islámica. Las siete arcadas
de arcos de medio punto de la galería porticada de San Miguel representarían las siete
primeras iglesias del cristianismo. Además, el siete también es el número de la
perfección, en la antigüedad. El interior de San Miguel es
muy sencillo y se ilumina por dos ventanas abiertas sobre el pórtico y otra aspillera
sobre el coro. Estas ventanas aparecen, en el exterior, cobijadas por grandes arquivoltas.
La torre de la iglesia es cuadrada y se diferencian dos cuerpos: uno primero de piedra y
el segundo (el superior) de ladrillo. San Miguel es la iglesia románica con la galería
porticada más antigua de España y de origen oriental." (Juan Pablo Tejero). Dentro
encontraremos capiteles con leones, un museo de arte sacro y pinturas en el ábside
románico-góticas.
La iglesia Nuestra Señora del Rivero, restaurada y declarada Bien de
Interés Cultural, también es de factura románica. Su galería porticada está compuesta
de nueve arcos, aunque solo siete de ellos sean originales. Las columnas, más esbeltas
que la de San Miguel, están rematadas por capiteles también de variedad temática. La
riqueza de su interior es justamente valorada y en la bóveda del ábside apreciaremos
restos de pinturas románico-góticas.
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