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Por
la carretera que sale del puente del río Duero dirección Almajano, a
pocos kilómetros de la capital y muy cerca de Renieblas, encontramos dos
pequeños pueblecitos sin grandes templos ni entornos naturales
espectaculares. Estamos en plena área de influencia de Numancia, según
puede verse en la hoja nº 350 del mapa geográfico y catastral a escala
1:50.000, entre los 41º 47’ y 41º 50’ de longitud y 2º 27’ y 2º
21’ de latitud, incluyendo también Renieblas. Por ahí discurre el río
Merdancho, el canal de riego de Buitrago, y todavía es posible ver algún
resto del campamento romano de Escipión en Renieblas, y de los
campamentos de Valdeborrón, Peña Redonda, La Rasa, La Dehesilla, Alto
Real, Castillejo y de las Travesadas en Garray, desde donde se asedió a
los numantinos hasta el final. Más cercano en el tiempo los templos
cristianos sucedieron a los arévacos y romanos y encontramos el santo
Cristo de los Olmedillos en Velilla de la Sierra muy cerca de una
romántica y olvidada estación de tren, así como ya muy próximo al
caserío, una Soledad con un crucero delante que caracteriza al pequeño
pueblo de Velilla.
Al
norte de Velilla atravesando el canal de Buitrago, en el paraje
"Campillo de Buitrago" y adentrándose en "la
Revilleja" de Renieblas, pueden recorrerse alrededor de 2 kilómetros
de calzada romana, sin perder de vista nunca las ruinas de Numancia al
fondo. En la actualidad esa zona y debido al canal de riego (que no riega
por imposibilidad física, ya que las tierras se encuentran más altas que
el propio canal) el paisaje está muy tocado por la mano del agricultor,
pero la calzada es fácilmente localizable si se tiene un poco de
paciencia. La tierra casi la ha cubierto pero la hierba crece rala y seca,
sin humus que la sustente, por el freno que suponen las piedras de la vía
romana.
No
vamos a encontrarnos con restos manifiestos, ni con tramos como el que
discurre por Mérida, fácilmente reconocible, pero sí podremos
solazarnos con la visión de Numancia e imaginarnos, sobre la calzada, la
dirección y velocidad de los carros romanos ante la llegada inminente a
la ciudad numantina, németon para algunos, solamente gran urbe para
otros. Ya cerca del pueblo de Velilla nos fijaremos atentamente en el
puente sobre el río Merdancho, pues grandes piedras sillares que afianzan
el firme de la carretera podrían ser de la vía romana.
Si
queremos visitar la ermita del Santo Cristo de los Olmedillos, hemos de
volver y tomar un camino que sale del kilómetro 5. También hemos de
tener en cuenta que la finca es particular, pero aquí no vamos a
tropezarnos con gentes como en Torretartajo, porque el encargado del
agricultor señor Borque, amable donde los haya, nos facilitará las
cosas. La finca conserva un horno en edifico exento en muy buen estado. La
ermita en un altozano recibe cada año la visita de los fieles de los
pueblos de alrededor que acuden en romería. Muy cerca la estación de
tren de Velilla ofrece al caminante el melancólico aspecto de todas las
estaciones en desuso.
Volvemos
a tomar la carretera que se dirige a Almajano; a la derecha la única
elevación que se ve recibe el nombre de Cerro del Tiñoso, desde ahí
cada año, los habitantes de Renieblas bendicen los campos y meriendan.
Conviene preguntar en Renieblas el camino que conduce al campamento romano
de Escipión La Gran Atalaya, situado en el cerro de la Atalaya; hasta ahí llegaba
también la calzada romana que mencionábamos, pero es imposible verla
porque se confunde con las tierras. Este campamento desde donde se divisa
también Numancia en la lejanía ha sido estudiado ampliamente; por todas
partes pueden verse montones de piedras y restos de cimentación; debió
ser muy grande, construido para resistir, los romanos más que los
numantinos, pues debieron pasar inviernos inclementes a 1.138 metros de
altura que es la cota más alta del cerro donde se ubicó. Unos tubos al
parecer de uralita quieren conmemorar la estancia allí de los romanos. En
el centro de Renieblas tiene Schultten dedicado un monumento, pues anduvo
excavando esos lares.
Ahora
iremos a ver el río Merdancho a su paso por Renieblas.
Renieblas
Por
el río Merdancho
Los habitantes de
este pueblo se sienten muy orgullosos de la adecuación turística del
entorno. Los manantiales que dejan su agua alrededor de la iglesia de
Nuestra Señora de la Cruz son de los más importantes de la provincia de
Soria, reciben el nombre de "Los Manaderos" y lo hacen en un
paraje donde se dan cita la iglesia y un cementerio, supuestamente
medieval, por donde sobresalen estelas funerarias. El agua discurre bajo
un puentecillo que también han restaurado, y lo hace tan limpia y
cristalina que toda la superficie está rebosante de berros.
Recomendamos arrancar los pequeños y más próximos al agua para despues
elaborar con ellos una exquisita salsa o sencillamente comerlos en
ensalada, aprovechando los ligeramente picantes y tiernos tallos que son
la parte más sabrosa de la planta.
Berros de fuente
El Merdancho discurre en solitario durante unos kilómetros, para antes de
llegar a Velilla y unirse al Moñigón y, ya juntos, desembocar en el Duero,
cerca de Numancia.
Este
interesante pueblo de Renieblas, cuyas tierras en tiempos sufrieron el
acoso de los romanos ha dejado perder parte de sus tradiciones. Como
decíamos más arriba, bendicen las tierras, pero la tradición tan remota
de encender hogueras, al menos en 1996 no se celebraba, esperemos que la
hayan recuperado o lo hagan cuanto antes. De esas hogueras prendían el
cirio pascual y las velillas para la celebración de los oficios el
Sábado Santo.
Cerca
de Velilla y Renieblas, a los pies del Tiñoso, está Ventosilla de San
Juan, pequeñísimo enclave de apenas 12 habitantes censados, que poseé
una iglesia románico-rural muy sencilla dedicada a
San Agustín, donde
podemos ver un trozo de friso ornamental de temas vegetales y un capital
corintio de época imperial, tal vez procedentes de Numancia. Blas Taracena, en su Carta Arqueológica, dice que en el altozano de Utrera
(topónimo no localizado en el mapa) excavó en un poblado poco extenso
destruido por incendio y halló tinajas rojas celtibéricas pintadas en
color vinoso. También dice que a 500 metros de este cerro y en el paraje
llamado "la Zorrera" (también sin localizar, y que tal vez
pueda referirse a "la Raposera") excavó 5 enterramientos
"cuatro sin caja ni ajuar y otro en sepultura de lajas de piedra,
donde apareció un pendiente de bronce de tipo visigodo, una grapa de
hierro pasada por dos clavos y varias alcayatas de hierro para la
clavazón del atúd también de tipo visigodo. Los objetos se guardan en
el Museo Celtibérico de Soria". El Museo Celtibérico ya no existe y
sus fondos se hallan integrados en el Museo Numantino. Precisamente estos
días hemos vuelto a visitar el estupendo museo y aunque hemos visto
restos visigóticos no recordamos, a pesar de nuestro interés. que
ninguno de ellos tuviera señalado como objeto hallado en Ventosilla. Por
Ventosilla de San Juan pasa el río Moñigón al que ya se le ha unido el
Merdancho.
©
Isabel y Luisa Goig
Renieblas
Por
el río Merdancho
El
Molino de Renieblas
por Mateo Ayllón Martínez
(formato PDF, 452 KB)
trabajo
finalista del I Certamen Etnográfico "José Tudela"
Fuentes
de Renieblas, por José Ignacio Esteban
Renieblas,
en el blog de Juan Carlos Menéndez
Renieblas
- caminosoria.com
Ventosilla
de San Juan, Iglesia de San Agustín,
Juan Carlos Menéndez
Ventosilla
de San Juan
- caminosoria.com
Velilla
de la Sierra
- caminosoria.com
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