De
manera sucinta (como procede en un texto preliminar, pero esencial)
queda reflejada en el prólogo de José María Carrascosa, que fue leído en
la Cruz del cerro, la historia de la ermita de la Virgen del Monte cuya
publicación vio la luz en el año 2017:
La ermita de la Virgen del Monte Seces, Sarnago - Asociación Amigos de
Sarnago (soria-goig.com)
Los
sarnagueses viven el presente diseñando el futuro y sin perder de vista
el pasado. Me parece un ejemplo de cómo debe vivir una colectividad. De
aquel pasado se rememoró, el domingo 12 día de la Trinidad, la subida de
la imagen de la Virgen del Monte desde la iglesia hasta la Cruz del
cerro, tal y como se había hecho durante muchos años. No exactamente
igual, pero parecido. En primer lugar la iglesia está en ruinas sin que
se vislumbre un futuro mejor. La ermita, como se lee en el prólogo, está
en la misma situación, el paraje donde se ubica la Cruz del cerro está
jalonado de pinos, por mor de la repoblación forestal, en lugar de
robles. La imagen hace muchos años que desapareció, pero no como en la
época de la morería, que eran escondidas para que no fueran profanadas,
si no que fue robada. Nada de esto significó un escollo para los
sarnagueses. El tallista Juan Ridruejo ha realizado una imagen de la
virgen del Monte, preciosa, Manuel Vallejo las andas y Rosi Lázaro los
adornos. Con ella, saliendo de las escaleras de la iglesia en ruinas, se
ha llegado hasta la Cruz del cerro, en laica procesión. Radiante el día,
hermosa la vegetación de jaras o estepa que en Sarnago llaman estrepa y
rosales silvestres o escaramujos. Todos los asistentes escucharon las
palabras de José Mari Carrascosa, escucharon algunos recuerdos de los
mayores y escucharon también una canción de José Antonio Labordeta que
parece escrita para Sarnago:
Somos como esos viejos árboles, batidos por el viento que azota
desde el mar. Hemos perdido compañeros, paisajes y esperanzas, en
duro batallar. Vamos a echar nuevas raíces por campos y veredas,
para poder andar.
Un acto
sencillo, del pueblo para el pueblo. Una emocionante mañana que culminó
con un aperitivo cuidado al máximo, ya que los quesos habían sido
elaborados en la comarca, concretamente en Oncala. Los sarnagueses ya no
nos sorprenden, son capaces de todo.
La
ermita de la Virgen del Monte Seces, Sarnago - Asociación Amigos de
Sarnago
Ermita de Santa María del Monte, en Sarnago